Sobre el Caso Briatore...

¡Saludos, gente! Una vez se han celebrado las Ferrari World Finals, en las que ha estado finalmente Fernando Alonso, doy por concluida la temporada 2009. En esta primera entrada de la pretemporada 2009-2010 sacare los dardos para lanzárselos a diez personas. Pero antes, pasamos la lupa por las noticias.

A pesar de que Toyota se marcha de la Formula 1, puede que el coche que tenían previsto usar la temporada que viene aparezca por las pistas, porque a pesar de que no van a vender el equipo, si van a poner en venta el diseño del que habría sido el TF110. Los clientes potenciales son Manor y USF1, los únicos equipos de los “novatos” que no llevan tan bien el desarrollo de su coche. Los chasis de Lotus y Campos Meta ya han superado los pertinentes test de choque, dando muestra de ser indudablemente los más aventajados de la clase.

Hablando de USF1, el equipo americano ha confirmado definitivamente su presencia en la parrilla, puesto que la FIA ya ha confirmado que el equipo afincado en Charlotte (EE.UU.) y Alcañiz (España) han respondido al “enséñame la pasta” de la cuota de entrada, una cuota de 440.000 dólares, 309.000 lereles a este lado del Atlántico.

Por otra parte, Flavio Briatore sigue disparando munición gruesa. Ahora dice que la FIA pacto su sanción en secreto. No son pocos los que creen, entre ellos yo, que el durísimo palo que le cayó a Briatore se debió más a la venganza personal de Mosley hacia el que a la gravedad del motivo por el que se le expulso ad eternum de la Formula 1, al menos en comparación a lo que les cayó a los otros implicados en el asunto (Piquet salió impune, previa inmunidad, y Pat Symonds fue inhabilitado cinco años)

No hace falta ser un lince para ver que las pruebas que tenia la FIA contra Renault en el Piñazogate no pasaban de ser “pruebas circunstanciales” Mosley y su banda esgrimieron el testimonio de Nelsinho como prueba principal. La telemetría también decía cosas, pero o lo miraron por encima o sencillamente lo pasaron por alto. Y también hay que decir que la actitud de Mosley (afortunadamente, ya lejos de la FIA) fue de todo menos honrosa, ya que lejos de mantenerse neutral y al margen del asunto, parecía que hacia presión para que hubiera sanción si o si. Y además, más que ir a por Renault, fue a por Briatore, que recordemos, fue quien lidero la rebelión de los equipos que a punto estuvo de dividir la Formula 1 y que puso a Mosley entre la espada y la pared.

Cuando Piquet dijo que en Singapur le dijeron hacer eso, Mosley vio la ocasión para devolvérsela a Briatore. Hizo un pacto con el piloto: Si le ponía la cabeza de Briatore en bandeja de plata, saldría de rositas a pesar de haber sido el ejecutor de la maniobra (podría haberse negado a hacerla) Nelsinho, resentido por el trato que le dio Briatore (llego al equipo creyendo que seria el numero 1 por decreto y acabo siendo lo que le tocaba, el segundo de un bicampeón) acepto la oferta sin dudar.

Una vez se aseguro el testimonio favorable de Piquet, paso a ocuparse de Renault, a quienes les dio a elegir una de dos: O se cargaban a Briatore o aunque las pruebas demostraran lo contrario, les declararía culpables y les echaría de la Formula 1 sin darles derecho a defenderse. Renault opto por la opción 1 y se cargo tanto a Flavio como a Pat.

El resto, como se dice, es historia conocida: Nelsinho impune, Pat inhabilitado hasta 2014 y Briatore expulsado de por vida. Fernando ni siquiera es imputado debido a que la FIA le considero inocente.

Y ahora, tanto Flavio como Pat han decidido ir contra la FIA del mismo modo que se menciona en la obra de Lope de Vega: “Fuenteovejuna”: “Todos a una”

Teniendo en cuenta las circunstancias en las que se impuso la sanción, el nuevo presidente de la FIA, Jean Todt, debería conmutar la pena de Briatore a una exclusión temporal o directamente concederle el indulto.

¡La próxima vez más, pero no mejor, porque eso es imposible!

Semper fidelis